¡Felicitaciones! Has completado la Semana 6 del programa ENCIÉNDETE.
Y esta semana, no solo escuchaste tu voz.
La afilaste. La limpiaste. La encendiste.
No hablaste más. Hablaste mejor.
No por educación ni corrección, sino por fuego interno.
Esta semana aprendiste a detenerte antes de hablar.
A preguntarte para qué hablas.
A reconocer cuándo la palabra surge desde una herida… y cuándo desde tu centro.
Notaste cómo te pesa una frase dicha por impulso.
Y cómo te aligera una palabra dicha con verdad.
Te diste cuenta de que hablar no siempre libera.
Y que muchas veces, el silencio lo dice todo.
Le diste dirección a tu voz.
Honestidad a tus elogios.
Presencia a tus gestos.
Y eso transforma no solo tu comunicación, sino tu realidad.
Porque cada vez que hablas, estás creando mundo.
Y esta semana, empezaste a crear con más intención.
Cuidaste tu palabra como medicina.
No para sanar a otros.
Para no contaminar tu propio fuego.
Te expresaste con afecto, sin exigir.
Con claridad, sin justificar.
Con verdad, sin dramatismo.
Y cuando no era necesario hablar… supiste callar.
Y en ese silencio, algo profundo se encendió.
Eso es lo que lograste esta semana:
hablar desde el fuego, no desde la niebla.
Hacer que tu palabra no sea carga… sino dirección.
Y ahora que tu voz se ha templado…
🔥 es momento de encender el fuego de tu visión.
Prepárate para la Semana 7.
Ahí donde el fuego se vuelve percepción.
Y tu energía… empieza a mirar de verdad.